SERVICIOS MÉDICOS
El laser de argón se utiliza en las siguientes patologías:
Las dos enfermedades producen oclusión de vasos sanguíneos e isquemia retiniana. Esta isquémica induce la liberación de mediadores que estimulan la proliferación de neovasos sobre la retina que pueden originar sangrados y desprendimientos de la retina.
El tratamiento con laser de argón de la retina isquémica evita la liberación de los mediadores y la formación de neovasos, atrofiando los ya existentes. En la retinopatía diabética proliferativa se trata toda la retina periférica con laser (Panfotocoagulación).
Cuando se produce un desgarro en la retina por tracción vítrea existe un riesgo alto de que la retina se desprenda al separarse la retina neurosensorial (RNS) del epitelio pigmentario de la retina (EPR).
El tratamiento con laser de argón alrededor del desgarro de la retina provoca una cicatriz entre el EPR y la RNS que impide el paso de líquido al espacio subretiniano y evita el desprendimiento de la retina (DR). Igualmente hay lesiones retinianas que predisponen al DR como agujeros atróficos, diálisis de la retina periférica o degeneraciones empalizadas que se pueden tratar con el mismo objetivo que los desgarros de la retina.
Estas enfermedades también dañan la pared de los vasos de la retina aumentando su permeabilidad. Además las dos enfermedades inducen dilataciones vasculares como microaneurismas (retinopatía diabética) y telangiectasias (obstrucción de vena).
Las alteraciones vasculares aumentan la permeabilidad induciendo edema macular. El tratamiento con laser de argón sobre los vasos anómalos los cauteriza reduciendo la permeabilidad. Además el impacto del laser induce la liberación de mediadores antiinflamatorios que ayudan a la resolución del edema. Sin embargo, los impactos de laser generan zonas sin visión (escotomas) por lo que el laser es cada vez menos utilizado desde que se disponen de antiVGEF y corticoides intravítreos.
Cuando en la DMAE exudativa las membranas neovasculares (MNV) aparecen lejos del centro de la mácula pueden destruirse con laser.
Ciertos tumores oculares, especialmente vasculares pueden tratarse con laser de argón.