Patologías Hereditarias, Inflamatorias y Tumorales
Los tumores intraoculares pueden afectar a los diferentes tejidos oculares: coroides, vasos y retina.
Los tumores pueden ser primarios (origen ocular) o secundarios (por diseminación metastática) a tumores sistémicos.
Pueden ser tumores benignos o malignos.
Los tumores oculares precisan un diagnóstico y tratamiento adecuados para maximizar los resultados funcionales y el pronostico vital del paciente.
Los tumores oculares ocasionan síntomas en fases avanzadas por ocupación de medios ópticos, afectación de la mácula o el nervio óptico o por exudación de líquido que ocasiona desprendimiento de retina exudativo.
El tratamiento de los tumores intraoculares depende de su estirpe y generalmente se realizan en centros especializados que integran servicios de oncología, radioterapia, quimioterapia, además de cirugía vítreo-retiniana.
El tumor ocular primario más frecuente es el nevus coroideo. El nevus coroideo es un tumor benigno pero puede malignizarse en un melanoma coroideo. El melanoma ocular es el tumor maligno primario más frecuente en la edad adulta.